OBJETOS PERDIDOS

Una de las ventajas que tienen las barajas con símbolos tan prístinos como los símbolos de tradición gitana - posos del café o del té, es su rápida ductilidad y adaptabilidad a cualquier tipo de indagación. Éstas pronto incluyen la búsqueda de objetos perdidos. Sin embargo no es tan fácil cómo parece. En mis pruebas he tenido un 50% de éxitos, y un 50% de fracasos - estimación bastante ajustada. No dudo que en todas las ocasiones mi baraja sí me estuviera diciendo dónde estaba aquello que había perdido, pero yo no logré descifrar bien las instrucciones o no logré encontrarlo. En los casos en que sí, la alegría siempre fue doble!!. 

Vuelvo de nuevo a la carga, pues encima he perdido 4 naipes de una baraja muy querida!!. Para cuando me di cuenta, estimo hubieran pasado unos 7 o 10 días. Importante también explicar que fue la propia baraja la que me indicó que algo estaba mal, jajaja, la vieja Sibilla hace estas cosas, me dio el horroroso Ataúd hasta que sentí la mosca detrás de la oreja!, sospeché y me puse a contar las cartas. Boom! 48 naipes de 52. Rastreé en mis notas y efectivamente eran los 4 naipes que configuraban mi última consulta con Sibilla. Busqué de manera lógica y metódica, pues tampoco son muchos los lugares donde puedo traspapelar 4 cartas. Nada. Fracaso. Como entrar en ese túnel de "es imposible, tienen que estar!" es agotador, opté por dejar el tema estar durante un tiempo. Hoy me propongo buscarlas de nuevo, pero me va a ayudar mi querido Maybe Lenormand.

Primer paso importante: preguntar si las voy a encontrar, si las puedo recuperar...

Y si!! las puedo recuperar. La cigüeña a parte de hablar de cambios y mudanzas, por supuesto nos habla de retornos, de migración de regreso al último nido. Cuando ellas sobrevuelan los árboles y se comienzan a asentar en esas masas de paja en los campanarios, se renueva la vida, la primavera se abre paso, los brotes retornan. Baco celebrando su fiesta personal con vino, entre otras varias cosas, es símbolo sencillo de alegría. Obviamente, no es un Sol, ni una LLave. pues tampoco es que sea la solución a todos mis males, pero encontrar mis 4 naipes perdidos y completar de nuevo mi bella Sibilla sí se merecerá descorchar un vino y brindar con ella. 

Bueno, pues dado el optimismo al que me invitan mis cartas, vamos con el segundo paso: 

Lógicamente la pregunta es ¿dónde están?, debemos concentrarnos en pedirles a los naipes pistas que describan el lugar en el que se encuentran. Planifiqué seleccionar solamente 4 cartas para reunir todas las características posibles del lugar en el que se encuentran, y de cómo encontrarlas...

ESTRELLA, ATAÚD, SERPIENTE, OJO

La Estrella y la caja del Ataúd juntas me llevan directamente a un sitio, que por otro lado es el lógico y esperable; si bien ya me da calma, porque podían haberse traspapelado de manera más inaccesible. Tengo un mueble de madera, grande, con cajones, estanterías y apartados de armario, donde guardo todas mis barajas, libros y demás artículos de esoterismo y adivinación. Sin duda, es en ese mueble donde están. En este caso en concreto, la tela que hay sobre el Ataúd me está llamando la atención, pues me puede estar dando un añadido, bien por barajas que tengo envueltas en telas, bien porque estén escondidas tras algo que las tapa o enmascara de alguna manera. Hasta aquí vamos bien. Es la Serpiente la que más me descuadró en esta respuesta. Ella no puede estar hablando aquí de traición, mordida o veneno. Puede estar haciendo referencia a artículos de una persona en concreto, una mujer, sabia y relacionada con la adivinación también, puede ser la autora de uno de los manuales que hay en el mueble, o puede estar indicando las características del objeto que más próximo tengan las cuatro cartas perdidas. Algo que se enreda y puede anudar, algo que es largo y tubular. Se me ocurren varias opciones aquí, y afortunadamente todas están en el mismo mueble. Pero también, y más importante, al unirse con el Ojo, pueden estar estas dos cartas finales diciéndome simplemente que "vuelva a mirar, porque he pasado por encima, con mala vista, no me he fijado suficientemente". Es bien sabido que las serpientes tienen mala vista, de hecho Ryan Edward le puso gafas a la Reina de Bellotas en éste su Maybe Lenormand, para recordárnoslo. Su presencia, más el énfasis que le añade el gran ojo abierto a continuación, con esas cuatro hojas (que debemos recordar, en esta tradición son hojas y no picas, mis 4 naipes perdidos!!) me convence: Vuelve a mirar, las has pasado por alto cuando revisaste tu mueble de barajas!!!. 

Esta tarde haré esa labor, y mañana vendré a confirmar si las encontré cómo y dónde me fue indicado en esta tirada. Deseadme suerte!!

ACTUALIZACIÓN: a 14 de Enero, 2018... LAS ENCONTRÉ!!!
Casi tiro la toalla, a la tercera vuelta de revisión de todo el lugar que esta tirada me indicaba, me dio por sacar los cajones de su sitio, y zas! pude ver el fondo del armario, allí estaban!!! deben haberse deslizado por un lateral, y caer al fondo cuando saqué todos los cajones de sus carriles. Increíble. Me pregunto si la serpiente no venía aquí entonces por lo retorcido y complejo del hallazgo, en lugar de por mala vista o despiste... claro que ni en mil años sabré cómo pudieron deslizarse hasta ahí, ni por qué quedaron fuera de su caja!! y eso sí que es despiste... En fin, las tengo, Alegría!.